8/5/64
El tema de esta noche es “Hablar desde la experiencia”. Hay una conversación que tiene lugar en el Libro de Juan entre Nicodemo, un miembro del Sanedrín, y Jesús. Es el capítulo 3, y le dijo a Nicodemo: “Hablamos de lo que sabemos y damos testimonio de lo que vemos, pero tú no aceptas nuestro testimonio. Si os digo cosas terrenas y no creéis, ¿cómo podéis creer si os digo las celestiales? Aquí tenemos a alguien que es miembro del Sanedrín, el orden más alto de la fe judía, y vino por la noche haciendo ciertas preguntas.
Ahora bien, en realidad no preguntó… lo llamó “rabino”… y Jesús admitió el hecho de que era maestro (eso es lo que es un rabino); y luego procedió a instruirle acerca de un gran misterio y le dijo: es necesario que nazcas de arriba, “porque a menos que nazcas de arriba, no puedes entrar en el reino de Dios” (versículo 3). Y él respondió: ¿Puede un hombre viejo entrar por segunda vez en el vientre de su madre y nacer? Y esto fue respondido de manera extraña, dijo: “Lo que es nacido de la carne, carne es, y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es” (versículo 6). Pero a menos que nazcas de arriba, no podrás entrar en el reino de los cielos. “El viento sopla donde quiere y oyes su sonido, pero no sabes de dónde viene ni adónde va; Así también ocurre con todo aquel que es nacido del Espíritu” (versículo 8).
