Quizás quieres...
¿Realmente quieres una experiencia de Dios? Aplícale este principio. Haz lo que yo hice cuando quise dejar Barbados y venir a América. Observé la perfecta ley de la libertad y perseveré. Dios no te da una ley para tus deseos de este mundo y otra ley para tu búsqueda de